Trasplante de Cabello
La calvicie es la pérdida del cabello sin regeneración. De origen genético en la mayoría de los casos, es necesario un tratamiento médico para detener la caída del cabello y un tratamiento quirúrgico para abordar las áreas, afectadas por la alopecia.
El trasplante de cabello utiliza microinjertos tomados de la cabeza del paciente, lo que elimina el fenómeno del rechazo del injerto.
La intervención
Las nuevas técnicas quirúrgicas permiten la aplicación homogénea de microinjertos dando un aspecto natural al conjunto del cabello.
El cabello implantado se toma desde la coronilla lateral o posterior del pelo.
Los microinjertos tomados se trasladan de inmediato a la zona de la calvicie. Muy a menudo, un trasplante de cabello se lleva a cabo en dos sesiones o más. El número de injertos necesarios depende del grado de calvicie y puede variar entre 200 a más de 2000 microinjertos, a sabiendas de que es posible llevar a cabo cerca de 500 microinjertos por sesión.
La intervención se realiza bajo anestesia local y dura aproximadamente tres horas.
La hospitalización es de varias horas.
Resultados y postoperatorio
Los resultados dependen en gran medida de la superficie de la calvicie. Cuanto más amplia es la pérdida de cabello, menos microinjertos se pueden aplicar de una manera discreta.
Todo el pelo implantado cae en los días posteriores a la intervención.
Esto es normal y el crecimiento de nuevo pelo comienza unas semanas más tarde.
Pueden aparecer edemas y hematomas después del trasplante, pero desaparecen los días siguientes.
Los resultados comienzan a ser visibles alrededor de ocho semanas después de la cirugía y son valiosos y apreciables después de tres meses
Se puede aplicar un champú inmediatamente después de la intervención, y no se necesita ningún cuidado especial.
Los riesgos
Pueden existir complicaciones después de un trasplante de cabello, pero son infrecuentes.
- Una infección del cuero cabelludo es excepcional. El tratamiento consiste en tomar antibióticos.
- Algunos injertos no enraízan; se puede cubrir como máximo el 10% de los microinjertos y pueden ser fácilmente reemplazados en la sesión siguiente.